La Paz, 27 ago (PL) El presidente boliviano Evo Morales afirmó hoy que tras las recientes protestas de cooperativistas mineros subyacían planes de un intento de golpe de Estado contra su gobierno, el cual fue derrotado.
Fue una conspiración política mediante movilizaciones que buscaban una supuesta reivindicación. Estamos esperando por las investigaciones, pero estoy convencido que nuevamente derrotamos un golpe de Estado, aseveró el mandatario durante una rueda de prensa desde la central ciudad de Cochabamba.
Durante su intervención, Morales analizó los recientes hechos violentos protagonizados por cooperativistas mineros, quienes bloquearon carreteras, agredieron a policías y periodistas y asesinaron al viceministro de Régimen Interior y Policía, Rodolfo Illanes Alvarado, hecho que calificó de «muy grave cobarde, imperdonable».
Me están dando informaciones muy preocupantes. Fue algo preparado, planificado, no pudo haber sido obra de un grupo de mineros, no fueron hechos aislados. Estamos encontrando documentos donde se asevera que las acciones buscaban tumbar al gobierno. Por tanto, era un golpe de Estado, explicó.
El líder del Ejecutivo detalló que los lugares donde se apostaron los manifestantes estaban preparados con insumos para resistir semanas; ahora «muchos dirigentes que impulsaron las protestas están prófugos e intentan escapar al exterior. Será tarea de la Fiscal y la Policía encontrarlos para someterlos a la justicia».
Criticó asimismo el apoyo de sectores de la derecha a esta situación de violencia, como consta en reportes y declaraciones a medios de prensa.
Dijeron: apoyamos a las cooperativas mineras porque están defendiendo la capitalización. Estaban de acuerdo con los cooperativistas mineros efectuaran contratos con el sector privado e internacional. Eso es la privatización y para ello habría que cambiar la Constitución, la cual vamos a respetar, enfatizó.
Morales concordó en que la mayoría del movimiento cooperativista minero fue engañado por algunos de sus dirigentes y «otros que en verdad son empresarios privados y usan el cooperativismo para sus propios fines».
En este sentido, precisó que muchos trabajadores fueron obligados o chantajeados con la imposición de multas o amenazas de expulsión si no se incorporaban a los bloqueos de caminos.
Aseguró sentir un gran respeto por el sector minero nacional, «pues conozco sus luchas de reivindicación»
El presidente Morales reflexionó sobre la ambición, «una maldición convertida en delincuencia que no sirve para la vida humana. Por eso le digo a las nuevas generaciones que no seamos ambiciosos. Cuando uno es honesto y trabaja con esfuerzo siempre obtiene resultados».
En corto tiempo hemos demostrado que habernos liberado de las imposiciones del Fondo Monetario Internacional nos ha permitido estar mejor económicamente. Esos son nuestros resultados. No vamos a abandonar a ningún sector. Pese a estos problemas, seguimos avanzando, complementó.